En respuesta a cinco demandas colectivas presentadas en Estados Unidos, un tribunal de apelaciones de Washington dictaminó que Honda y otros fabricantes de automóviles no violaron la ley al almacenar mensajes de texto y registros de llamadas desde teléfonos inteligentes conectados.
Honda, Toyota, Volkswagen y General Motors fueron objeto de demandas colectivas separadas pero relacionadas por violar las leyes de privacidad. Todas estas acciones fueron desestimadas este año, y esta semana el Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito de Estados Unidos decidió no reabrir los casos para continuar con el litigio, según el comunicado oficial.
Los jueces del caso agruparon todos los casos porque «el contexto fáctico y las cuestiones jurídicas son prácticamente idénticas» y rechazaron la apelación no porque los fabricantes de automóviles tuvieran la culpa, sino porque las quejas no cumplían con los requisitos de daños del estado de Washington. Acto privado.
Para tener éxito en la etapa de alegato de una queja según la Ley de Privacidad del Estado de Washington, el demandante debe alegar daño a «su negocio, su personal o su reputación». Contrariamente al argumento de los demandantes, una mera violación de la ley de privacidad no es suficiente para satisfacer el requisito legal de daño.
En otras palabras, está bien que su automóvil «intercepte, grabe, descargue, almacene y pueda transmitir» mensajes de texto y registros de llamadas automáticamente y sin permiso, porque la violación de la privacidad es potencial, pero el daño no es necesariamente real.